8 mar 2009

"DIA DE SAN PATRICIO"


LEPRECHAUN
DUENDECILLO NACIONAL DE IRLANDA
Leprechaun es un duende solitario que pasan su tiempo fabricando zapatos, si oyes el sonido de su martillo, él está trabajando y sabes que lo has encontrado. Si lo capturas, puedes obligarle a que revele el paradero de su tesoro, pero si lo pierdes de vista por unos segundos, él desaparecerá.
En la mitología celta, un leprechaun es un tipo de elfo o duende que habita en la isla de Irlanda desde antes de la llegada de los Celtas. Como otras razas mitológicas de la tradición irlandesa, los leprechauns se consideran criaturas de naturaleza dual material y espiritual.
Las imágenes del leprechauns, especialmente las que se ven cuando se acerca el día de san Patricio, suelen mostrar un hombrecillo vestido de verde.


Sin embargo, según cuenta la tradición, era posible verle vestido con chaqueta roja de brillantes botones plateados, calzas azules o marrones, zapatos grandes con hebillas gruesas de plata y sombrero tricornio de copa alta. Su estatura varía entre los quince centímetros y algo más de medio metro, y pueden tener cara traviesa y digna a la vez.

Alguna vez se muestra con barba y fumando en pipa. Cuando está trabajando, suelen usar un delantal de cuero de zapatero y un pequeño martillo con el que fabrica o arregla pequeños zapatos de hada.
Aparentemente, el leprechaun no tratan a sus compañeras hadas mucho mejor que a los humanos, ya que sólo les hacen un zapato, nunca el par completo. Pero quizá la incapacidad del leprechaun de hacer un par completo de zapatos se deba sólo a descuido, pues a menudo está un poco achispado de tanto beber cerveza casera.


Lleva dos petacas de cuero. En una hay un chelín de plata, una moneda mágica que regresa al monedero cada vez que paga con ella… en la otra lleva una moneda de oro que usa para probar y sobornar su salida de situaciones difíciles. Esta moneda se convierte en hojas o cenizas en cuanto el leprechaun a pagado con ella.
Los leprechauns son también llamados guardianes de antiguos tesoros (abandonados por los Danos cuando estuvieron por Irlanda), enterrados en vasijas u ollas. Esta puede ser una de las razones por las que los leprechauns tienden a evitar el contacto con los seres humanos, a los que tachan de criaturas estúpidas, frívolas y codiciosas. Si son capturados por un mortal, prometerán grandes riquezas si se les deja marchar.







ANTIGUA BENDICIÓN IRLANDESA
“Que la tierra se vaya haciendo camino ante tus pasos,
que el viento sople siempre a tus espaldas,
que el sol brille cálido sobre tu cara,
que la lluvia caiga suavemente sobre tus campos y,
hasta tanto volvamos a encontrarnos,
que Dios te lleve en la palma de su mano.”




EL GRANJERO Y EL LEPRECHAUN
Un granjero se encontraba trabajando en sus tierras cuando descubrió por casualidad a un hombrecillo que se escondía bajo una hoja. Convencido de que se trataba de un leprechaun, el granjero capturó enseguida al hombrecillo en su mano y le preguntó dónde tenía escondido el oro.
El leprechaun sólo deseaba que le liberasen, por lo que enseguida le reveló que su tesoro se hallaba oculto debajo de un arbusto cercano.
Sin soltar a su diminuto cautivo, el granjero se encaminó hacia el lugar indicado, pero resultó que el arbusto estaba rodeado de otros cientos de arbustos idénticos.


Como no tenía a mano ninguna herramienta para cavar, se quitó uno de sus calcetines rojos y lo ató a una rama para marcar el arbusto que el leprechaun le había señalado. Cuando se dirigía a su casa en busca de una pala, el leprechaun le señaló que ya no necesitaba sus servicios para nada y le pidió que le liberara.
El granjero accedió, pero no sin antes hacerle prometer que no iría a quitar el calcetín ni a llevarse el oro.
Buena idea... pero no resultó como esperaba. Cuando el granjero regresó al campo a los pocos minutos, ¡todos los arbustos estaban marcados con calcetines rojos idénticos!
La gente suele decir que los leprechaunts son muy pequeñitos, pero el corazón que albergan es enorme.




SAN PATRICIO

El día 17 de marzo es al celebración de San Patricio, es una fiesta irlandesa que honra a San Patricio, quien fuera el misionero que evangelizo y llevó el Cristianismo a la Isla en el siglo 400 DC.
Desde la iniciación de las festividades la semana es tiempo de fiesta y de llevar el color verde, en América se celebro por primera vez en el año 1737 en la ciudad de Boston, Massachussets, USA.
San Patricio cuyo nombre real era Maewyn Succat, fue secuestrado a la edad de 16 por piratas y quienes lo vendieron como esclavo. Durante sus 6 años de cautivo, él encontró fuerza en su fe religiosa. Después de que escapó, San Patricio estudió religión en Europa y viajo a Irlanda para llevar la palabra de Cristo allí.
Él se acostumbró a usar el trébol de tres hojas, como una metáfora para explicar el concepto del Trinidad (padre, hijo y espíritu santo).
La leyenda cuenta que San Patricio condujo a todas las serpientes fuera de Irlanda, entrando en el mar y se ahogaron. La explicación seria que la serpiente era un símbolo pagano venerado, y quizás éste era un cuento figurativo que alude al hecho que él alejo el paganismo fuera de Irlanda.

El trébol, tradicionalmente, ha sido una planta que cumple dos propósitos principales: por un lado confiere buena suerte y por otro priva a los espíritus malévolos y a las brujas de su voluntad evitando que actúen a su antojo.


-LEYENDAS IRLANDESAS-
La Piedra de Blarney es la piedra de la pared de la torre del Castillo de Blarney en el pueblo irlandés del mismo nombre. Se supone que besando la piedra trae el regalo de elocuencia persuasiva al besador.
Los orígenes de las propiedades mágicas de la Piedra de Blarney no están claros, pero una leyenda dice que una mujer vieja lanzó un hechizo en la piedra para premiar a un rey que la había salvado de ahogarse. Besando la piedra bajo el hechizo el rey consiguió la habilidad de hablar dulcemente y convincentemente.